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Artículos > Bibliografía y transliteración: guía para estudiantes y bibliotecarios

La bibliografía es una componente esencial de cualquier trabajo académico, permitiendo acreditar las fuentes utilizadas y ofreciendo a los lectores los medios para verificar la información. Para estructurar estas referencias, existen varias normas internacionales, cada una con sus particularidades. La transliteración es crucial cuando las fuentes están escritas en idiomas que usan alfabetos no latinos. Vamos a explorar cómo se integra la transliteración en diferentes normas bibliográficas.

Biblioteca Pública de Estocolmo, Suecia
© Daniel Forsman, Unsplash

Las diferentes normas

Norma APA (American Psychological Association)

La norma APA se utiliza ampliamente en las ciencias sociales y del comportamiento. Su estilo busca proporcionar claridad y uniformidad en la presentación de las fuentes. La APA privilegia la claridad y la accesibilidad de la información, haciendo que la búsqueda de fuentes sea rápida y eficiente. Exige que las referencias en idiomas que utilizan alfabetos no latinos sean transliteradas para garantizar la legibilidad y coherencia.

Autor(es): Apellido, inicial(es) del nombre.
Fecha: Entre paréntesis.
Título: En cursiva para los libros, sin cursiva para los artículos.
Fuente: Incluye el nombre de la revista en cursiva, el volumen, el número y las páginas para los artículos.

Ejemplo:
Autor original: Иванов, Иван
Transliterado: Ivanov, I. (2020). Psikhologiya sovremennogo cheloveka. Moskva: Nauka.

Norma MLA (Modern Language Association)

Utilizada principalmente en los campos de las letras y las humanidades, la norma MLA se distingue por su simplicidad y su énfasis en el autor y la página de referencia. El estilo MLA destaca el texto en sí y los detalles de la publicación, simplificando así la lectura y verificación de las fuentes. También impone la transliteración por las mismas razones que la APA. Sin embargo, pone más énfasis en la claridad y la fidelidad a la fuente original. En MLA, el nombre del autor y el título se transliteran, pero los elementos de la publicación (como el editor y el lugar) pueden mantenerse en su forma original si se utiliza el alfabeto latino.

Autor(es): Apellido, nombre.
Título: En cursiva para los libros, entre comillas para los artículos.
Fuente: Incluye el nombre de la revista, el volumen, el número, el año y las páginas.

Ejemplo:
Autor original: 李四
Transliterado: Li, Si. Zhongguo gudian wenxue. Beijing: Renmin Chubanshe, 2018.

Biblioteca de Dublín, Irlanda
© Luke Tanis, Unsplash

Norma Chicago

La norma Chicago ofrece una buena flexibilidad con sus dos sistemas de citas: el estilo Chicago A (o autor-fecha, utilizado en las humanidades, y que usa notas al pie y una bibliografía) y el estilo Chicago B (o notas-bibliografía, utilizado en las ciencias exactas, para citas en el texto). La norma Chicago permite incluir tanto la transliteración como, si es necesario, el original entre paréntesis para mayor claridad.

Autor-fecha: Similar a APA, pero con algunas variaciones en el formato de las fechas y los títulos.
Notas-bibliografía: Utiliza notas al pie y una bibliografía detallada.

Ejemplo:
Autor original: أحمد, محمد
Estilo Chicago A: Ahmad, Muhammad. 2019. Tarikh al-‘Arab al-mu’asir. Cairo: Dar al-Kutub.
Estilo Chicago B: Ahmad, Muhammad. Tarikh al-‘Arab al-mu’asir. Cairo: Dar al-Kutub, 2019.

Norma ISO 690

La ISO 690 es una norma internacional utilizada para una variedad de disciplinas. Es versátil y acepta diferentes tipos de documentos, incluidas las fuentes digitales. La ISO 690 es a menudo adoptada por instituciones académicas que buscan una norma flexible e internacional. La ISO 690 insiste en la precisión de la transliteración para asegurar que las referencias se mantengan fiables y rastreables internacionalmente.

Autor(es): Apellido, nombre.
Título: En cursiva o entre comillas según el tipo de documento.
Fuente: Incluye el lugar de publicación, el editor y el año.

Ejemplo:
Autor original: 宮崎 駿
Transliterado: Miyazaki, Hayao. Kaze no Tani no Naushika. Tokyo: Tokuma Shoten, 1984.

Norma Harvard

Utilizada sobre todo en las ciencias naturales y sociales, la norma Harvard es conocida por su simplicidad y su enfoque autor-fecha. Es popular por su formato directo y fácil de seguir. La transliteración sigue los mismos principios que APA, permitiendo una uniformidad y una facilidad de lectura en los trabajos científicos.

Autor(es): Apellido, inicial(es) del nombre.
Fecha: Entre paréntesis.
Título: En cursiva para los libros, sin cursiva para los artículos.
Fuente: Incluye los detalles de la publicación como el editor y el lugar.

Ejemplo:
Autor original: Иванов, Иван
Transliterado: Ivanov, I. (2020). Biologiya evolyutsii. St. Petersburg: Nauka.

Biblioteca de Stuttgart, Alemania
© Tobias Fischer, Unsplash

Diferencias y Usos

Aunque cada norma tiene sus particularidades, comparten objetivos comunes: asegurar la claridad, la coherencia y la credibilidad de los trabajos académicos. La elección de la norma depende a menudo del campo de estudio y de los requisitos específicos de las instituciones o publicaciones. Por ejemplo, un estudiante de psicología probablemente utilizará la APA, mientras que un historiador optará por la norma Chicago.

En resumen

Comprender y utilizar correctamente las diferentes normas de bibliografía es crucial para los estudiantes y los bibliotecarios. No solo garantiza el rigor académico, sino que también facilita el proceso de investigación para los lectores. También se trata de comprender y aplicar correctamente la transliteración en las diferentes normas bibliográficas. Al dominar estas normas, te aseguras de que tu trabajo sea respetado y accesible, al tiempo que rindes homenaje a las fuentes que enriquecen tu investigación.